El mayor consumidor de agua embotellada del mundo

 

En 2020 México fue el principal consumidor de agua embotellada en el mundo, pese a que le cuesta 108 veces más de lo que gastaría si paga el servicio del agua potable que ofrecen los organismos públicos. Según un informe del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) de 2011, en los hogares terminan desembolsando entre 5 y 10 por ciento de sus ingresos en agua embotellada al mes.

Los mexicanos estamos acostumbrados a consumir agua embotellada, compramos desde garrafones hasta botellas de menos de medio litro. En el país la mayor parte de la población recurre a ella y lo cierto es que para consumo humano, el agua es aún más vista como un producto que como un derecho; un producto cuyo costo puede ser hasta 751 veces mayor al del agua de la red pública. 

En México, el consumo promedio de agua por persona es de 380 litros al dia, lo que equivale a 11 mil 400 litros al mes, segun la Conagua. De otro modo las tarifas mensuales oscilan entre 29.90 pesos y 25.60 pesos por persona, en estados como Ciudad de México, Querétaro, Leon y Aguascalientes, donde el servicio de agua embotellada tiene el costo mas alto del país.

¿Por qué los mexicanos consumimos tanta agua embotellada?

 

Cada mexicano consume en promedio alrededor de 1,978 metros cúbicos de agua por año, mientras que el promedio mundial es de 1,385. Así mismo, del total de agua que utilizamos, 5% la utilizamos en actividades diarias como la preparación de los alimentos, limpieza personal y del hogar, mientras que el otro 95% representa el consumo indirecto, que involucra hábitos alimenticios, patrones de consumo y estilos de vida.

Si bien el agua que llega a los hogares está limpia, los sistemas de almacenamiento y tuberías internas en los hogares son muy susceptibles a contaminación, además de que sus dueños descuidan la limpieza y mantenimiento de las cisternas y tinacos del país.

Algunos especialistas consideran que tres factores influyen en el elevado consumo de agua embotellada en el país:

  1. La poca confiabilidad en los sistemas operadores de agua.
  2. El incremento del acceso y la conveniencia del agua embotellada.
  3. La falta de una estructura regulatoria que controle esta industria creciente.

Aunado a lo anterior, en México hay un manejo inadecuado de los recursos hídricos y un servicio deficiente, además el suministro suele ser insuficiente, irregular y de baja calidad.

La falta de información ha sido decisiva para los consumidores mexicanos, quienes constituimos el mercado número uno a nivel mundial de este producto, ya que en cada hogar mexicano se consumen en promedio 4 litros de agua embotellada por día y al menos 80 garrafones al año.

Los especialistas explican que la vieja desconfianza y el temor histórico promueve la desinformación sobre el agua potable: los consumidores no tienen confianza en el agua potable que reciben. Aunque no existe ningún estudio exhaustivo comparativo entre la calidad del agua embotellada y la del grifo, los mexicanos seguimos consumiendo la embotellada, a pesar de que en el país la calidad es aproximadamente igual.

Además, no olvidemos que el alto consumo de agua embotellada también tiene su impacto en el medio ambiente. Se calcula que diariamente el consumo de agua embotellada genera alrededor de 21 millones de botellas de plástico que son tiradas a la basura. De esa cantidad de envases sólo se recicla aproximadamente el 20%.

Se calcula que los mexicanos gastamos en la compra de agua embotellada el 70% de lo que se recauda por tarifas del servicio de agua. Un estudio del Banco Interamericano de Desarrollo determinó que el 81% de los mexicanos consumimos agua embotellada. De esta forma, los hogares terminan desembolsando entre 5% y 10% de su ingreso mensual. El problema es más acentuado para los que menos tienen, pues ese gasto llega a representar el 20%.

Impacto ambiental del agua embotellada

 

Una botella de plástico tarda en degradarse hasta 500 años, de acuerdo con datos obtenidos por Greenpeace España. Al estar presentes tanto tiempo en los océanos, los animales marinos pueden quedar atrapadas en las botellas o confundirlas con comida que en realidad no los nutre y les produce la muerte.Además, en el informe “Impacto de la contaminación por plástico en áreas naturales protegidas mexicanas” de Greenpeace, se afirma que la degradación del hábitat ocasionada por este tipo de basura tiene impactos graves en la biodiversidad de varios puntos críticos puesto que los arrecifes de coral, manglares y pastos marinos son sitios de crianza para casi todas las especies marinas.Ese estudio de Greenpeace México encontró que de los residuos plásticos hallados en las costas de ocho áreas naturales protegidas mexicanas (superficie, columna de agua y fondo marino), 6 % corresponde a botellas. Este artículo sería el de mayor presencia, después de las bolsas de plástico (8%) entre los residuos hallados.Frente a este contexto, en Greenpeace estamos convencidas de que el mejor desecho es el que no se produce y tú tienes hoy la oportunidad de hacer el cambio. Pídele al Senado mexicano que reforme la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos (LGPGIR), que prohíba los plásticos de un solo uso y haga responsable a las marcas de los envases, empaques y embalajes que utilizan.

Problema

Nuestros océanos se ahogan en plástico y necesitamos tomar medidas que nos ayuden no solo a encontrar alternativas de compra y consumo, sino a cambiar nuestra manera de vivir. Reciclar ya no es suficiente. Debido a la contaminación plástica más de 100 mil animales marinos mueren cada año.

Solucion

El modelo comercial que incluye el plástico desechable que producen las corporaciones debe cambiar con urgencia. Las empresas ya no pueden ignorar el problema y ampararse en los vacíos legales para evadir su responsabilidad. Es urgente un cambio de hábitos donde la norma no sea comprar y tirar.

¿Que podemos hacer para marcar un cambio en el medio ambiente?

 

Con la implementacòn de pequeñas acciones y con la constancia poedemos marcar grandes acciones que ayuden a mejorar el medio ambiente, frenar el desecho de botellas y otros elementos plásticos.

Los especialistas consideran que hay tres formas de hacerle frente al creciente consumo de agua embotellada:

  1. Capacitar adecuadamente a los organismos que tratan el agua en el país;
  2. Instalar sistemas de tratamientos caseros del líquido, es decir filtros, y
  3. Cambiar los patrones de consumo individual.
  4. Siempre y cuando el agua sea potable, no compres botellas plásticas, utiliza una que puedas reciclar cada vez.
  5. Utiliza filtros si te es posible para mejorar el sabor y la calidad del agua del grifo. A menudo no es que el agua no se pueda beber, si no que no tiene un sabor totalmente insípido. Esto se puede mejorar usando filtros.
  6. Siempre que puedas, compra productos que vengan empaquetados en cajas, no en botellas o contenedores plásticos.

En el tema de la calidad del agua debe haber corresponsabilidad, los ciudadanos debemos fomentar hábitos de aseo y limpieza de tinacos y cisternas; estos se han de lavar, clorar con las dosis recomendadas y tallar por lo menos dos veces por año. Existe gran variedad de filtros y sistemas de purificación adaptables a las necesidades específicas de los hogares urbanos y rurales, es importante promover su uso. Hay una gran incertidumbre sobre la calidad del agua que consumimos y se deben tomar medidas para fomentar decisiones informadas.

https://www.greenpeace.org/mexico/participa/liberate-del-plastico/